* Toda persona tiene derecho a disfrutar una vida plena, independientemente de su sexo, edad o religión, expresó

 

Al fijar el posicionamiento de la presidencia de la Mesa Directiva, en el marco del Día Internacional de la Cero Discriminación, que se conmemora cada 1 de marzo, el presidente de este órgano de gobierno de Cámara de Diputados, Sergio Gutiérrez Luna, indicó que “las y los legisladores tenemos que contribuir a erradicar la discriminación, a través de la confección de leyes que combatan estos lamentables actos”.

Hizo votos para que este día sirva para recordar “que si los tres Poderes de la Unión y en los tres ámbitos de gobierno construimos decisiones públicas que ayuden a erradicar la discriminación, estaremos intensificando no solo nuestra vida constitucional, sino convirtiendo la dignidad humana en una realidad”.

Comentó que esta fecha establecida por la Asamblea General de las Naciones Unidas, constituye un llamado a promover el derecho de cada persona a disfrutar una vida plena y digna, independientemente de su sexo, edad, religión, lugar de procedencia, condición social, raza, origen étnico, orientación sexual, lengua, condición médica u opiniones.

Gutiérrez Luna señaló que discriminar significa excluir, restringir, menoscabar, obstaculizar o impedir el ejercicio de las libertades fundamentales de cualquier persona.

En ese sentido, dijo, si la democracia sustantiva busca lograr la eficacia de la igualdad entre las personas en el goce de todos sus derechos, la discriminación resulta absolutamente antidemocrática.

“Cada uno de nosotros tenemos talentos únicos que pueden contribuir al desarrollo de nuestra nación, comunidad y familia, no importa lo diferente que seamos, los gustos o preferencias, todas y todos tenemos los mismos derechos”, manifestó.

Agregó que, de acuerdo con los resultados de la Encuesta Nacional Sobre Discriminación de 2017, del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), 20 por ciento de los 84 millones de personas de 18 o más años se han sentido discriminada por algún motivo y los más frecuentes son: forma de vestir, el arreglo personal, el peso, la estatura y las creencias religiosas.