*Resoluciones en torno a la inconstitucionalidad del aborto no cumplen con el requisito de justicia para todos los mexicanos.
- Al lamentar las recientes resoluciones de la Suprema Corte de Justicia de la Nación de despenalizar el aborto, la Arquidiócesis de Xalapa consideró que esta acción “lo podrán hacer legal, pero no es moral” y los fallos “no cumplen con el requisito de justicia para todos los mexicanos”.
“Para nosotros los cristianos siempre ha sido y seguirá siendo un crimen, tan es así que hay una pena de excomunión para quien lo procura y éste se consuma siempre y cuando haya habido los agravantes de conocimiento, edad y libertad, es decir que tengan conocimiento de que existe la pena, que se cuente con la mayoría de edad y la libertad para hacerlo”, refiere en la circular número 5/2021, titulado “Ante Dios y ante la Suprema Corte”, de fecha 11 de septiembre del año en curso,
El documento, signado por monseñor José Trinidad Zapata Ortiz, administrador Apostólico de Xalapa y por el presbítero José Ignacio Barrera Murrieta, secretario canciller, se destaca que esto está estipulado en el Código de Derecho Canónico, Nuevo Libro VI c. 1397§ 2).
Se destaca que dichas decisiones emitidas por la Corte, en torno al Código Penal de Coahuila y la Constitución de Sinaloa “no cumplen con el requisito de justicia para todos los mexicanos pues son una pena de muerte para muchos concebidos indefensos a quienes muchas madres van a estar en posibilidad de negarles la entrada al banquete de la vida.
En ese tenor, subraya: “Los ministros de la SCJN han cambiado las leyes, pero la Iglesia no puede cambiar su doctrina: "La vida humana debe ser respetada y protegida de manera absoluta desde el momento de la concepción. Desde el primer momento de su existencia, el ser humano debe ver reconocidos sus derechos de persona, entre los cuales está el derecho inviolable de todo ser inocente a la vida" (Catecismo de la Iglesia Católica No. 2270)”.
En ese tenor, menciona que la Corte ha pasado por encima de la Constitución, pero la iglesia no puede pasar por encima del evangelio. El evangelio de la vida no puede cambiar y lo seguiremos anunciando. Para la Iglesia el derecho a la vida es fundamental y universal y es el que hace posibles otros derechos.
“Ante la disyuntiva de estar a favor de la vida o a favor de la cultura de la muerte no tenemos alternativa, nosotros estamos a favor de Dios, a favor de la vida, a favor de la paz y de la justicia para todos, especialmente los más indefensos, es decir los concebidos no nacidos”, se enfatiza en el comunicado.
Ante esta situación hizo un llamado a asumir el evangelio de Jesucristo y a definir nuestra fe en los principios que se derivan de ella.
“Este es un momento en el que debemos preguntarnos ¿a quién queremos servir? (cfr. Jc 24,15), ¿a Jesucristo que quiere llenarnos de vida en abundancia en este mundo y después darnos la vida eterna o al príncipe de este mundo, el mentiroso y asesino que quiere nuestra ruina?”
“También estamos llamados a valorar la importancia de la familia como escuela de valores evangélicos y a educar a los hijos en los valores de la vida, de la paz y de la justicia que están contra corriente de los valores del mundo. No nos dejemos engañar por la cultura de la muerte, Jesús vino para que tengamos vida y la tengamos en abundancia (cfr. Jn 10, 10)”, señala por último el comunicado.