¿O cuál es más de culpar,

aunque cualquiera mal haga:

la que peca por la paga,

o el que paga por pecar?

Sor Juana Inés de la Cruz

La Dirección Estatal Ejecutiva del Partido de la Revolución Democrática lamenta la decisión de algunos alcaldes y alcaldesas electas que aceptaron la invitación para integrarse a las huestes del partido en el poder.

Esta decisión personal trae consigo la traición al partido que les dio su confianza, pero sobre todo es una traición a la ciudadanía que voto por ellos convencidos por una ideología, una campaña y esperamos no se arrepientan de esta torpe e indigna decisión. Las y los electores saben por qué los eligieron como opositores y por qué rechazaron al candidato del partido en el poder.

Estos brincos colectivos de autoridades municipales, en nada favorecen a la democracia y en nada aportan al desarrollo y bienestar social de la población, como se observa en los últimos tres años de gobierno en Veracruz.

Tampoco mejoran la imagen del partido gobernante, cuyo arrebato político confirma la manera de como la sociedad mira al poder absolutista, a los que rechazan la pluralidad política y se piensan fuertes pintando de un solo color al Estado, desdeñando las lecciones de la historia.

Lamentamos que en pleno siglo XXI, cuando creíamos que la etapa histórica de negociar “espejitos por oro” estaba superada, hoy constatamos el retroceso político que se vive en Veracruz.

Ninguna democracia se consolida con los arrebatos de coleccionistas; nadie se fortalece cuando se falta a la palabra, a la ley y se sustituye la decisión del voto ciudadano por los acuerdos privados del poder.

El PRD refrenda su compromiso social; se manifiesta en contra de los autoritarismos y a favor de las libertades, los derechos ciudadanos y la democracia que hoy se encuentra en riesgo.

Atentamente

Dirección Estatal Ejecutiva del Partido de la Revolución Democrática