CD.DE MEXICO.- La producción nacional de azúcar, de la que dependen al menos 180 mil cañeros y genera 500 mil empleos en la cadena agroindustrial, tiene un reto con la comercialización.
Además de la reducción que el Tratado de Libre Comercio México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) establece en las exportaciones a nuestro vecino, en el país se enfrenta la competencia de los edulcorantes y que en el etiquetado de alimentos se le ubica en el conjunto de “azúcares”, a pesar de que es un producto natural, aseveró Carlos Blackaller, líder de la Unión Nacional de Cañeros de la Confederación Nacional de Propietarios Rurales.
Blackaller dijo que el reto de esta zafra es que quedan casi 1.4 millones de toneladas que se deberán llevar al mercado mundial. “Una buena zafra en el mercado es un gran reto porque 35 por ciento de la producción tiene que ser exportada”, luego de que el 28 de julio concluyó la molienda en 49 ingenios.
Estimó que para la que comienza en noviembre del ciclo 2021-2022, la producción será de 6.2 a 6.4 millones de toneladas y para que haya sostenibilidad en la industria todos los excedentes deben ser exportados.
Destacó que en el país, durante los últimos 25 años, el consumo de azúcar de caña ha bajado, pues se encuentra estancado en 4 millones de toneladas, “está la competencia de la fructosa de maíz que entró al 30 por ciento de consumo nacional del consumo calórico.
En relación con el etiquetado de los alimentos, mencionó que se utilizó la palabra “azúcares” como un todo, incluida la fructosa. “La norma de etiquetado no da un trato justo a los productores de azúcar. Hay que considerar que el azúcar de caña es un producto natural, el ingenio sólo la extrae; en cambio, la fructosa no está en el maíz, se usa un proceso químico para obtenerla”.
La producción se obtiene en 15 estados, en una superficie industrializada de 789 mil 996 hectáreas. Las entidades con mayor generación son Veracruz, con 2 millones 130 mil 528 toneladas; Jalisco, 733 mil 175; San Luis Potosí, 643 mil 605, y Chiapas con 338 mil 480 toneladas.
Con un consumo nacional de azúcar de 4 millones de toneladas, la producción de 5.7 millones de toneladas del ciclo 2020-2021 –8 por ciento más respecto al anterior– deja un excedente de 1.7 millones de toneladas que tendrán que exportarse sin un mercado asegurado. En el contexto del T-MEC hay compras viables por cerca de medio millón de toneladas, pero el resto deberá entrar a otros mercados, sostuvo el dirigente en entrevista.
Indicó el dirigente cañero, que antes, con el TLCAN, México podía exportar todos sus excedentes de azúcar a Estados Unidos, pero ahora hay un cupo de 841 mil toneladas, “existe conocimiento de un volumen de 400 mil a 500 mil toneladas aseguradas y conforme a las necesidades de Estados Unidos se ha ampliado el cupo.
“Sin embargo, hay restricciones porque al menos 70 por ciento del azúcar debe ser de tipo crudo y se entrega a las refinerías de Estados Unidos para darle un valor agregado”. El 30 por ciento de azúcar restante puede ir refinada o estándar.